Exigen evitar un fraude

Crítica de la Argentina – Los principales partidos de la oposición instaron a la Cámara Nacional Electoral a que tome una serie de medidas para evitar “un nuevo fraude” en las legislativas del próximo 28 de junio.

Por otra parte, la Coalición Cívica pidió esta semana, de “manera urgente” a la Cancillería argentina, que se convoque formalmente a la Organización de Estados Americanos (OEA) para que mande veedores con el fin de “garantizar la transparencia del acto electoral”.

La virtual multipartidaria “contra el fraude” está conformada por Gerardo Morales y Gustavo Lema, de la UCR; Patricia Bullrich y Claudio Bargach, de la CC; Rubén Giustiniani y María Barbagelata, del Partido Socialista; Luis Lusquiños y Pedro Balde, por los hermanos Rodríguez Saá, y Esteban Bullrich, del PRO.

En un petitorio de diecinueve puntos, los dirigentes demandan, entre otras cuestiones, la designación de “delegados judiciales” en cada uno de los locales de votación del país; que se garantice la “no presencia” de personas ajenas a los comicios en los locales de votación y que “se autorice” la presencia de fiscales informáticos en el recinto de procesamiento de datos.

A principios de este año, Elisa Carrió, la líder de la CC, pidió al director del Departamento para la Cooperación y Observación Electoral de la OEA, Pablo Gutiérrez, que “arbitre todos los medios a su alcance para promover la transparencia de los procesos eleccionarios que tendrán lugar en el año 2009”.

En la carta Lilita detalla la serie de irregularidades “que se han presentado en las últimas elecciones parlamentarias de octubre de 2007”, que “han tenido como único objeto la violación de toda garantía de libre elección”. También aduce que las maniobras “no han tenido otro resultado que dañar considerablemente el sistema democrático y conducir el país por el riesgoso camino de la manipulación y discrecionalidad en las reglas de juego que todos los actores políticos deben respetar”.

La presentación incluye el caso más escandaloso: el de José C. Paz, gobernado por Mario Ishii, uno de los preferidos de Néstor Kirchner, por su capacidad de movilización. De hecho, envió al voluminoso jefe comunal a fiscalizar por el PJ las elecciones de Santiago del Estero y las de Catamarca.

Acaso tuvo en cuenta la denuncia radicada en los tribunales federales por las fuerzas de la oposición que denunciaron que allí se utilizaron el 65% de presidentes (o vicepresidentes) de mesa falsos.

En la pormenorizada denuncia se explica que de 480 mesas hubo al menos 270 personas que usurparon los puestos de presidente y que obviamente no habían sido las seleccionadas por la Junta Electoral.

Todo está documentado con nombre y DNI de cada una de estas personas y consta en el expediente letra L Nº 5/2008, radicado en el Juzgado Federal N° 1 de la ciudad de La Plata (provincia de Buenos Aires), a cargo del Juez Humberto Blanco.

También se agregan los casos de Mendoza; Córdoba, a través del caso de Luis Juez, y San Luis, donde la maniobra de agregar fiscales de mesa a los padrones electorales le costó el procesamiento al ex senador peronista Raúl Ochoa.